Reino celeste de amor
Afuera por el sur de la casa cantaba un cristofué,
mientras yo sostenía en mis manos el libro ¿Qué
es la filosofía?, escrito por Howard Selsam, Editorial Grijalbo, S. A.
México, D. F., 1968, y este libro tiene de epígrafe
Los hombres no pueden ser entretenidos
por más
tiempo con promesas sobre el
Cielo. Ya
reclaman, como derecho
inalienable,
establecer, aquí, en la Tierra,
el reino celeste.
Enrique Heine
Enrique Heine fue poeta romántico
francés, vivió entre finales del siglo XVIII y mediados del siglo XIX, y me
permito parafrasearlo
Hombres y mujeres no hagamos promesas de
Cielo. Empecemos a construir en la Tierra el reino celeste de amor, que es el
Dios…
Canta
un pájaro y cantan otros pájaros
y
canta un gallo;
me
distraigo una vez y tantas veces,
cuando
riego las plantas
por
los tres costados del patio,
y
hoy vino el muchacho vecino,
el
del lado este de la casa,
a
reclamar una gallina,
la
correteó, la agarró
y
se fueron muchacho y gallina;
sé
que hago pequeñas cosas buenas,
mas
si cada quien hace pequeñas cosas buenas,
así
estamos construyendo el reino celeste de amor,
y
así al mal entre todos lo derrotamos;
cantemos
alegres, cuando alguien hace bien,
miremos
cada cosa buena de cada quien,
y
los que hagan el mal,
confiemos
en que ellos se juzquen,
se
aparten y no reincidan en el mal nunca más…
Si
algo quiero
es
poder escribir líneas desnudas y sinceras,
sin
máscaras y sin enredos
y
así creo que construyo pedacitos en la Tierra
del
reino celeste de amor...
Adelfo Morillo
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