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miércoles, 23 de abril de 2014

Sentimos y soñamos



Sentimos y soñamos

     Anoche antes de dormirme me llegó la urdimbre de un sueño, para soñarlo cuando estuviera dormido, y mientras seguía despierto el entramado del sueño, se fue desvaneciendo, y dormido tuve un sueño muy violento, se trataba de un crimen que alguien cometía, no sé quién era el asesino y tampoco los detalles, ahora escribo y concluyo que la causa de tal sueño violento, tiene su basamento en mis temores cotidianos, en mis angustias que yo no quisiera darles ni un segundo de mi tiempo…
     Cuando duermo, quisiera tener lindos sueños, que fueran un bálsamo para mis afanes diarios, pero no siempre sucede así, son tantos los feos sueños que he tenido desde mi infancia, por tanto en mis vigilias sueño lindos momentos, sueño con nuestro país en paz en cada instante, donde nos sepamos comprender en nuestras maneras de ser, de pensar y de sentir diferente, sueño con que no haya gente en la miseria material ni espiritual, sueño con que no haya pobreza extrema, sueño con que cada uno de nosotros pueda llevar y sustentar una vida digna, sueño con que estas líneas que suelto por esta ventana le sirvan para reflexionar a los amables lectores y lectoras que la visitan…
     Sueño el cuento de Chuang-Tzu del hombre que soñó ser mariposa, y cuando despertó no sabía, si él soñó ser mariposa, o si la mariposa soñó ser hombre, sueño cosas tan hermosas, que para mí son reales, pero parecen imposibles o casi imposibles en la realidad de la mayoría de los hombres y mujeres de nuestro país y del mundo…
     Hoy antes de dormirme no sé si me llegue el entretejido de algún sueño, no voy a pensar en eso, ya veré si sucede, lo que sí sé sin dudas es que en mis vigilias, seguiré hilvanando sueños, con agujas de alegría, con hilos de colores y con dedales que dejan volar los sueños, porque tejo con dedales abiertos por el lado de la yema del dedo medio o dedo cordial, por donde sentimos y soñamos…