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viernes, 1 de abril de 2016

Rómulo Gallegos, poeta


Rómulo Gallegos, poeta

en el aire sereno aleteaba la ternura de un blanco vuelo de garzas

       La trayectoria de cuentista la comienza Gallegos en 1913 con la publicación del cuento Los aventureros; y de novelista la inicia en 1920 con El último Solar, que en posterior edición le da el nombre de Reinaldo Solar; luego en 1922 publica los cuentos Los inmigrantes, y La rebelión; posteriormente en 1925 publica la novela La trepadora, en 1929 Doña Bárbara, Cantaclaro en 1934, Canaima en 1935, Pobre negro en 1937, El forastero en 1942, Sobre la misma tierra en 1943; y sigue con la publicación de La rebelión y otros cuentos en 1946; retoma la novela con la publicación de La brizna de paja en el viento en 1952, y Tierra bajo los pies en 1971; como vemos es una prolija producción en el mundo del cuento y de la novela, razones suficientes para justificar el don poético de Gallegos, y así sustentar el título de estas líneas, mas vamos a presentar imágenes, símiles y metáforas entresacadas de Doña Bárbara, en el capítulo ¿Con quién vamos?, al final leemos
   
       ¡Ancho llano! ¡Inmensidad bravía! Desiertas praderas sin límites, hondos, mudos y solitarios ríos

       En las líneas finales de Uno solo y mil caminos distintos

       …ya el sol empezaba a ponerse, rumbo de baquianos a través de la sabana, que es, toda ella, uno solo y mil caminos distintos

       En La lanza en el muro

       Un bando de garzas se alejaba hacia el sur, una tras otra en la armoniosa serenidad del vuelo

       En El recuerdo de Asdrúbal

       …Lejos en el profundo silencio, se oía el bronco mugido de los raudales del Atures

       En El familiar

       Reina el silencio en el caney. La noche ha avanzado bastante y la luna ahonda las lejanías de la sabana

       En La doma

       El llano es caliente como el gran viento de su soleada inmensidad, como la fiebre de sus esteros

       En La bella durmiente

       A un mismo tiempo estaba saliendo el sol y poniéndose la luna, y el palmar se estremecía como un bosque sagrado en el silencio del alba

       El último capítulo tiene por nombre Toda caminos, toda horizontes

       ¡Llanura venezolana! ¡Propicia para el esfuerzo, como lo fue para la hazaña, tierra de horizontes abiertos

       Y de líneas epílogo recordemos que la editorial Fondo de Cultura Económica en 1954 se une a la conmemoración de los venticinco años de la publicación de la primera edición en 1929 de Doña Bárbara, y quien escribe el Prólogo de esta edición vigésimo quinto aniversario es el autor de la novela Rómulo Gallegos, y en sus palabras finales con estro poético escribe

       …una tarde de abril, a orillas de un río llanero… Si dije que probablemente oí entonces el bramido salvaje de un toro, bien he podido agregar que en el aire sereno aleteaba la ternura de un blanco vuelo de garzas

  Adelfo Morillo