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martes, 3 de junio de 2014

Andanza por nuestro idioma 90



Andanza por nuestro idioma     90

     León, del latín leo, de este animal se dice que es rey de la selva; Napoli, Nápoles, Napoleón, su desglose es Nea polis leo, el león de la nueva ciudad; Lyon, ciudad del sureste de Francia; en Venezuela, Santiago de León de Caracas, en el Escudo de Armas de la Villa de Todos los Santos de Calabozo, a ambos lados, muestra dos hermosos y erguidos leones; en términos forenses se dice de contrato leonino, cuando el mismo otorga toda la ventaja o ganancia a una de las partes…
     Cuando yo dictaba la cátedra de Latín II en la Escuela de Letras de la Universidad de Los Andes en Mérida, una de las fábulas que leíamos en latín y traducíamos al castellano era La cabra, la vaca y el león, y la misma trata de la alianza que hicieron estos tres animales para salir a cazar, y en la primera cacería atraparon un venado o ciervo, y el león empezó a dividir Esta parte es para mí, porque soy el rey de la selva, esta segunda parte me corresponde, porque soy el más fuerte, y esta tercera y última parte, también es para mí, porque mi nombre es león…
     En la temporada de beisbol venezolano de mil novecientos sesenta y siete, mil novecientos sesenta y ocho mi hermano mayor, Rafael Ángel, estaba oyendo el juego final para decidir el campeonato, él iba a los Tiburones de La Guaira, y yo solo para llevarle la contraria le dije que yo iba a los Leones del Caracas, se decidió el juego a favor del Caracas, y desde ese día soy seguidor de los Leones del Caracas…
     Se cuenta del día, cuando unos monos estaban en lo más alto de unos árboles, y ese día les dio por burlarse de los animales que pasaban por debajo, llegó la jirafa, y los monos le decían ¿Por qué le dirán jirafa, si tiene ese cuello como una manguera..?, y se reían…, al rato se presentó la cebra, y los monos le gritaban ¡Ay, miren la cebra todavía anda con la piyama..!, se rascaban la barriga y se reían…, y cuando llegó el león, así le dijeron ¡Ay, miren al león con esa melena, parece una mujercita..!, y en medio de las burlas y risas, se desprendió uno de los monos, y las manos, patas ni cola o rabo de nada le sirvieron, no pudo agarrarse y cayó frente a las patas del león, y el mono repuesto del susto, le dice ¡No, qué va león, me tuve que bajar, porque esa mamadera de gallo de esos monos es inaguantable..!