Somos seres sensitivos 4
Las plantas y nosotros como pertenecientes al reino animal somos seres sensitivos, hombres y mujeres pensantes; mas nos preguntamos, ¿y si los demás animales tuvieran un cierto porcentaje de pensamiento?, porque si nos tomamos tiempo, para observarlos, ellos en determinados momentos se ven en la necesidad de elegir entre varias opciones, sea para seguir una vía por donde seguir en vez de otra, y también así en variadas situaciones en donde se ven obligados a tomar decisiones, o ¿quizás han respondido solamente al azar? Sabemos que hay personas, cuya labor consiste en estudiar comportamientos animales. De las plantas sí sabemos que solo son seres vivos sensitivos. Ahora bien, me ubico en el reino animal y como tal, recuerdo las primeras veces que, aun siendo de poca edad, estuve presente en un velorio, y a lo largo de mis años he presenciado estos momentos en numerosas ocasiones, incluso de cuando murió mi bisabuela materna, mi abuela materna de crianza, mi abuelo materno de crianza, mi mamá, y también de cuando murió nuestra hija, Airene Fabiola, de cinco meses; y desde mi infancia hasta los días actuales, cuando hago presencia en situaciones tan tristes, me he venido haciendo preguntas recurrentes, ¿a dónde va el espíritu, será que aun ronda en el ambiente y no miran, y solo en esa forma intangible es cuando tienen respuestas a cada cosa, que para los que seguimos en cuerpo tangible, cuando no logramos responder con razones científicas demostrables, optamos por decir que tales custiones pertenecen al campo de la filosofía? Podemos ubicarnos en los que pensamos que hay una vida finita del cuerpo, mientras el espíritu mora en nosotros, y que cuando el
espíritu se va de nuestro cuerpo, el espíritu sigue inmortal, y esta creencia la mantenemos sin dudar en ningún momento, porque confesamos que somos creyentes en Dios, por su hijo testigo, Jesús (Salvador, en hebreo) que vino a redimirnos con su muerte física en la cruz…. Hasta aquí estos pensamientos y sentimientos, para ustedes que siguen y leen este espacio entre redes…
Adelfo Morillo
