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miércoles, 17 de abril de 2013

Andanza poética por el paisaje venezolano (1)


Andanza poética por el paisaje venezolano (1)

     Los hombres y mujeres poetas encuentran motivos para sus haceres creadores en las formas del paisaje, aquí vamos a plasmar una antología de hacedores venezolanos que le cantan al diverso paisaje de nuestro país, y así nos iniciamos con Arnaldo Acosta Bello cuando de su florilegio Canto Elemental, leemos en la poesía Recuento: “Me iba por la orilla / violenta de los ríos / y agrupaba mis pasos / donde la arena era / más blanca y más callada”... Seguimos nuestro viaje lúdico por los estros poéticos, y del poemario Acuareliñas de María Luisa Alonso nos adentramos en la poesía Jazmines donde leemos estos versos: “Centinela del jardín. / vertical sobre la calle, / es milagro que no estalle / la tapia con el jazmín”… Continuamos con este poeta de nombre griego y apellido aborigen, Dionisio Aymará, que de su libro, Horario de Vigilia, extraemos de la poesía Humano Poderío, y nos dice en versos de La Fuerza Original: “En aquel tiempo eran los hombres todavía poderosos / y puros como el fuego y el agua / que se levantan en el alba sobre los grandes bosques / tañedores de verdes guitarras”… Mientras hacemos este recorrido poético, nos topamos con Camilo Balza Donatti, y en su poemario Zumba que zumba nos cautivan unos versos de Rosita en flor: “Como una estatua de aroma / hecha con pulso del tiempo / su nombre sabe a los frutos / más viejos que tiene el huerto”… Hay diversas maneras de acercarse a nuestro paisaje, pensamos que una de ellas es cuando caminamos por los distintos espacios de nuestra patria, por los llanos, por las playas y mar, por las montañas y médanos, por los valles y ríos, y otra forma es por las huellas escritas de nuestros poetas, hombres y mujeres que le cantan al paisaje en sus variopintos modos, y en este caminar nos habla Pepe Barroeta, en su florilegio Arte de Anochecer leemos estos versos de la poesía Huerto de leche: “Una vaca pasta. / En el recodo la miro bajar / y siento lamer su cielo de rocío”… Cada persona tiene sus particulares gustos, y quizás no nos han sabido presentar el amante gusto por la poesía, cuánto quisiéramos que este sencillo esfuerzo, sirviera para que unos cuantos más aprendan a deleitarse en los sabores intangibles de los versos, y entonces esta poeta Velia Bosch en su poemario Arrunango nos sorprende con estos versos de su poesía a lo humano y al paisaje, Muchachita negra: “Muchachita negra, / muchachita blanca, / manecitas morenas / le nacen al alba / y lleva la noche / un oscuro cuento / en el alma…”