En mi canto
Los alientos de mis hijos conforman
mi cielo,
y ando con ellos estirando el
tiempo…
Con mis hijos camino y conversamos,
y contento los escucho,
comemos y bebemos, jugamos, ganamos
y no perdemos,
nunca perdemos, y estoy con ellos
estirando el tiempo…
En mi tiempo huelo el Torbes, el
Chama, el Guárico, el Apure,
huelo el frailejón, la malva y el
mastranto
y el tiempo con mis hijos conforma
mi cielo…
Dios, te agradezco el aliento, mis errores y mis aciertos,
Dios, ando contigo, con mis hijos y
mis amigos,
Dios, acrecienta mi amor por Ti,
por la vida, y por mis hijos,
y también por mi labor, por la
gente, por los amigos, y aún más…
Cada segundo y cada aliento los
estiro en el viento,
respiro, leo, escribo, y me elevo
con la música que me gusta…
Me inspiran las flores, las
mariposas, los cundeamores,
y sueño un mundo de paz entre
todos,
paz que encuentro en las nubes, en
los ríos, en los niños…
Mis hijos son presencia y
recuerdos, conforman mi cielo,
mis hijos están cerca y están
lejos, pero nunca en el olvido,
no los olvido, me alientan, me
inspiran, me dan alegrías…
Dios, gracias más allá del número
de estrellas,
y gracias más allá del amor en el
tiempo,
por mis hijos, y por seres humanos
en el amor,
y en el amor y en la paz florecemos
en el tiempo…
Me gusta escuchar la música de los
ríos,
y sentir el misterioso concierto de
los astros,
y es terrible el estruendo de los
astros,
no conocen piedad, dolores, ni
angustias,
solo se estremecen, giran, estallan,
y nos sorprenden con cataclismos en
algún lugar del mundo,
y gemimos, lloramos, sobrevivimos o
morimos en el tiempo…
No hay comentarios:
Publicar un comentario