martes, 13 de abril de 2021

 

Respeto por la palabra     97

Cocos

En casa tenemos dos cocoteros, hace años los cosechamos, tomamos el agua, comemos la pulpa, también con la pulpa hacemos dulce de coco... Por allá por los sesenta, yo era un muchacho y me gustaba escuchar a Lila Morillo, cuando cantaba: Una piedra tiró un cocotero / y al instante un coquito cayó...      Y no me gusta, cuando a los niños los asustan diciendo: Ahí viene el coco...      También cuando alguien estrena o come algo muy apetitoso o anda de novio o de novia con alguien, se escucha decir: A mí no me haces coco...      Cuando una chica o mujer luce senos grandes y lindos, se dice: Tiene buenos cocos...       De alguien cuando es muy inteligente, se dice: Es un coco o es todo un coco...     De una persona alta y delgada se dice que es una vara de tumbar cocos...    Y cuando alguien no se quiere angustiar por cosas que no puede solucionar, dice: Yo con eso no me voy a romper el coco...     A un calvo se le dice: Cocoliso...    Al vehículo que tiene una portezuela en el techo, se dice que tiene quemacoco...      Hay un trabalenguas que dice: Compadre, cómprame un coco. / Yo no compro coco, / como poco coco como, / poco coco compro...     En lenguaje comercial si se habla del precio de algo en bolívares, se pudiera decir: Eso vale cien mil cocos...     Y para que afirmemos nuestra identidad con genuina querencia venezolana, todavía se escucha decir dentro y fuera de Venezuela como podemos leer en la página 135 del libro de historias Del Trocadero al Pasapoga..., escrito por Oscar Yanes: -¡Hostia! Es verdad lo que escribió Carlos Santis, en el ABC. Estos venezolanos bajaron del cocotero al Cadillac...       El agua de coco y la pulpa tienen propiedades medicinales; el coco es Cocos nucifera (llevan nuez)...

Adelfo Morillo

No hay comentarios:

Publicar un comentario