Sutil vuelo de
libélulas, mariposas y luciérnagas
Veníamos de Maracay el Director del
Colegio, la Secretaria ,
la Tesorera
y yo, Presidente de la Comunidad Educativa ,
que venía manejando, y cuando pasábamos frente a la entrada de Matafrailes, vi
a orilla de la carretera unas siluetas que gesticulaban y gritaban, y de pronto
delante del carro por mi vía miré que se dibujaba una estructura de una
camioneta, y así como apareció, desapareció, me quedé pensando si había sido un
espejismo o una ilusión óptica, y para salir de dudas pregunté ¿vieron algo?, y cada uno dijo que había
visto como una forma de un carro muy viejo…Eso sucedió hace como veinte años, y
en toda mi vida de infancia y en la que llevo de adulto, esa ha sido la única
vez, que he visto tal fenómeno insólito e inasible…
Me gusta contar cosas verdaderas, no digo
ni escribo mentiras, esa aparición fue como a las siete de la noche, y le doy
crédito, porque quienes me acompañaban, vieron algo similar a lo que vi delante
en la vía…
Hay tantas cosas que me llenan de asombro,
y son muy reales como una flor solitaria en medio de la sabana, un padre que
abraza a los hijos, o el lucero vespertino que parece siguiendo los guiños de
luna…
Hay tantos fenómenos inasibles como el
relámpago que parpadea y alumbra dentro de las casas, las nubes que nos regalan
formas caprichosas, o la ternura de una madre amante…
Yo vengo de los ríos Guárico, Orinoco,
Apure, Chama, Mucujún, Pedregosa, Albarregas y Milla, en mi infancia el
Guárico, Orinoco y Apure, y en mis años adultos Chama, Mucujún, Pedregosa y
Milla, que me bañaron y me dieron de beber, pero también son inasibles como el
viento…
Y entre tantas manifestaciones inasibles o
ingrávidas, me voy tras el sutil vuelo de libélulas, mariposas y luciérnagas…
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