Una y otra oración
Una oración que debemos hacer a diario es
por las personas que tienen ideas suicidas y por las que están al borde del
suicidio, para que en el momento extremo miren y empiecen a andar en el camino
de amor a Dios… Pienso que dichas personas se apartaron o nunca han buscado el
camino de amor a Dios, y no han abonado en sus almas fe, distinta de fanatismo,
ya que este también es contrario al camino de amor a Dios; entonces que nuestra
oración sincera implore por las personas con ideas suicidas, por las que están
al borde del suicido y por las personas fanáticas…
Otra oración debemos hacerla por las
personas que como yo, cuando dormimos tenemos revoltijos de sueños inconexos,
porque pienso que si nuestro subconsciente nos depara tal amasijo de sueños,
seguramente es porque en nuestro ser consciente llevamos confusiones y hasta
desvaríos, por tanto bien nos merecemos una oración sincera…
Cuando hablo de complejos, digo que
aceptemos nuestra apariencia física, y doy el ejemplo de que una rosa no busca
ser clavel, ni un cristofué intenta ser ruiseñor, y el agua no es vino, ni el
vino es agua, y quizás pequeños o grandes complejos son unos de los ingredientes de esa inmensa
bolsa de revoltijos que va guardando el subconsciente, y entonces dormidos nos
sorprenden algunas o tantas veces tal amasijo de cosas…
Confieso que a mí me sucede con frecuencia
algún amasijo de sueños, y cuando despierto desorientado, pienso tratando de
conseguirle sentido a tal revoltijo de imágenes, y como hoy me digo, sí, ando
en el camino de amor a Dios, pero eso no significa que yo y tantas otras
personas estemos exentos de confusiones, de tentaciones ni de equivocaciones, y
por tanto oremos y roguemos para acrecentar nuestra fe…