Memorias rosas y escarlatas
Aquí en este
pueblo,
en medio del
llano,
en este pueblo villatodosantino,
en la Misión de
los Ángeles,
en una calle
ciega,
en un rincón no
muy lejano,
aquí vivo en mi
casa,
leo en los libros
y en las plantas,
aprendo en el alba
y con las torcazas,
contemplo las
lluvias y los chubascos,
admiro el arcoiris
y el mastranto,
escucho a la gente
y el trueno de los relámpagos,
miro el atardecer
y las garzas,
escucho el gavilán
y las paraulatas,
siento la brisa y
los quebrantos,
pienso en cosas
bonitas y en los remansos;
así vivo en mi
casa
de domingo a
sábado,
en el día y en las
noches,
de enero a
diciembre;
me gusta un
parrando con arpa,
me gusta el cantar
de buena garganta,
sea de hombre o de
mujer
de pie frente al
arpa,
me gusta el baile
de pasaje o de joropo,
me gusta cómo la
buena pareja baila,
me gusta el sonar de
las alpargatas
y cómo siguen el
sonidito de las maracas;
así vivo en mi
casa,
día tras día,
noche tras noche,
momento a momento,
sea triste o
alegre,
momento a momento,
si el momento es
triste,
con el tiempo
pasa,
si el momento es
alegre,
con el tiempo se
dilata,
se dilata en
memorias rosas y escarlatas,
se dilata en
recuerdos bonitos
que nunca pasan.
Adelfo Morillo
