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lunes, 5 de octubre de 2015

Lengua castellana 8


Lengua castellana                        8

       La sílaba es la más pequeña emisión de voz, que en la escritura se puede separar a partir de las palabras bisílabas; así leemos que una vocal por sí sola puede conformar una sílaba, veamos, a-gua, a-ma; a veces la encontramos acompañada de una hache muda (h), ha-cia, a-ho-ra; la encontramos en combinación de vocal y consonante y viceversa, an-tes, al-re-de-dor, al-gu-no; también en la combinación de vocal y vocal, ai-re, au-dien-cia, oi-do-res; y en combinación de consonante-consonante-vocal-consonante-consonante, de igual forma crea sílaba, trans-por-tar, frons-ti-pi-cio


El niño y la magia

       En una mañana de diciembre fue al bosque un niño pobre de dinero, y rico en alegría. Allá en el bosque transcurría el tiempo, en colores tiernos de paisaje decembrino. Había llovido en el bosque y el niño se divertía con la verde frescura que despedía el ambiente natural, y de pronto se queda suspenso al mirar que los árboles impregnados de lluvia parecían llenos de luz, irradiaban fosforescencias mágicas y maravillosas; el niño seguía encantado ante tal conjunción de hermosura, pensaba y soñaba, sonreía y volaba, y el tiempo seguía trascurriendo de forma fantástica, inolvidable. Y el niño permaneció ahí, hasta cuando la luna nocturna le recordó que debía volver a su casa junto a sus padres, desanduvo el camino de vuelta a casa, mientras pensaba que ese milagro vivido por él debía darlo a otros niños y a adultos con corazón de niño, y entonces decidió arrancar una rama de un árbol que estaba en el patio de su casa, y la plantó como arbolito al frente de su casa, y la adornó con vidriecitos y con piedrecitas de colores, y con la luz del sol y con los reflejos de luna esos sencillos adornitos despedían brillo y destellos, muy parecidos al dulce encanto que él había contemplado en los árboles impregnados de lluvia, allá en el bosque…

Adelfo Morillo