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sábado, 5 de octubre de 2013

Busco mi canto


Busco mi canto

     Si hemos encontrado el camino de amor y andamos en él, nos vamos a dar cuenta de que cada cosa, espacio, momento y circunstancia tienen su razón de ser; una piedra distinta a otra, un árbol frondoso y otro seco, muerto; el llano o la montaña, el río o el mar, el frío, la calidez o el calor; el amanecer, mediodía, tarde o noche; la fiesta, la alegría, el trabajo, la tarea, el velorio, el entierro o la tristeza, el enamoramiento, el matrimonio o divorcio… Si miramos bien, entendemos que la vida es un conjunto infinito de causas y efectos, y vamos descubriendo que al lado de la basura refulge una flor hermosa, si vamos caminando, en bicicleta o en carro, miramos que están tumbando una vieja casa, para dar paso a una edificación, y el espacio es sucio y feo, y frente a esos escombros pasa una mujer joven y muy linda; criticamos con pesimismo, nos molestamos, andamos de mal humor, y sin darnos cuenta volvemos al optimismo y al buen humor, porque vivimos lo permanente y lo efímero; la vida es permanente, lo efímero y frágil es la corta vida de cada ser viviente, nuestra vida es muy corta, nos vamos y queda el resto de vidas también frágiles y efímeras, y el mundo sigue girando en su órbita rutinaria…
     Si andamos en el camino de amor, disfrutamos cada segundo, cuando comemos algo que nos gusta, cuando bebemos lo que nos encanta; saludamos y escuchamos a los familiares, amigos, conocidos y a los demás; leemos sin prisa, caminamos con gusto, si cae lluvia la contemplamos, sabiendo que es benigna y trágica a la vez, y si nos moja, dejamos que nos acaricie… El camino de amor nos da sufrimiento, pesares y tristezas, para que de eso aprendamos, y seamos portadores de alientos optimistas y de alegrías…. Ahora tengo dos angustias, y mientras esto escribo, escucho cantar un cucarachero, y antes de sentarme a escribir miré las plantas y las flores en el patio, y en la cocina mi mujer prepara el desayuno, y escucho el ventilador que refresca la computadora y a mí…El cucarachero no se cansa, sigue por ahí cerca y canta, cómo canta, yo también busco mi canto, porque quiero que mi canto sea útil y sencillo para los que lo lean…