Andanza por nuestro
idioma 23
Los
venezolanos sabemos por lo general hacer las cosas bien, nos tomamos los
asuntos en serio, y esto lo vemos en los oficios que desempeñamos, en las
diversas profesiones, como artistas, deportistas y asimismo los estudiantes,
pero también nos gusta combinar las labores por más serias que sean con el
bochinche, la mamadera de gallo, el relajo, los chistes, y todo tipo de buen
humor; y en este punto me dediqué a buscar el origen de la palabra bochinche, y
no la localicé por ningún lado; pero en mis recuerdos estudiantiles de primaria
y bachillerato y en mis lecturas de nuestra historia patria, recuerdo que fue
una madrugada, después de la
Capitulación de Francisco de Miranda en el año 1812 ante
Domingo Monteverde, y este por no cumplir con los acuerdos expresados en el
documento, por tal motivo un grupo de patriotas apresaron a Francisco de
Miranda, y este ante lo intempestivo de la hora, reaccionó ante este hecho
diciendo ¡Bochinche, bochinche, esta
gente es tan amiga de un bochinche…!
Ante mi
asombro de no encontrar pista acerca de la palabra bochinche, me dejo caminar
hasta mis tiempos todavía de infancia aquí en Calabozo, cuando en compañía de
dos de mis primos hermanos nos las pasábamos en un constante bochinche, en mi
casa, en la casa de mi tía, en las calles, en el patio de la escuela, en
cualquier sitio y momento, y el marido de mi tía usaba una palabra más extraña
todavía, para referirse a nuestro permanente bochinche, él nos decía que
dejáramos el corrincho, que nos la pasábamos en un sola corrinchadera, que si
no nos cansábamos de corrinchar, y ahora cuando estoy escribiendo, siento que
debe tener esencia de corredera y correr…
En esta
andanza por las palabras persigo brindar especificaciones precisas, pero en un
tono ameno y con exposiciones sencillas, porque por muy serio que nos parezca a
veces el estudio de nuestro idioma, lo podemos matizar de párrafos con colores
y sustancias de nuestra cotidianidad…